Don Quijote J. Reilly

Vamos con un poco de kaskete, que lo tenemos un tanto abandonado.

Recientemente, nuestro corresponsal de lo seriamente absurdo asistió a una despedida de soltero, y entre dimes y diretes, menesteres variopintos y secretos inconfesables decidío compartir con su fiel y siempre insatisfecho público uno de los episodios de tan interesante andanza. Sin mucho más que se me ocurra...

Rural House (A Road Movie)

Dice un ancestral, pero no por ello menos cargado de razón, proverbio chino que: "Lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas", así que aunque se de buena tinta que os morís de ganas por enteraros de lo que ocurrió el fin de semana pasado en la casa rural donde celebramos la despedida de soltero, no puedo relataros lo que allí sucedió, en primer lugar, por respeto a las ardillas, y en segundo lugar, porque los de la torreta del SEPRONA se nos echarían encima para sacarnos la piel a tiras.

Pero... ¿Que ocurre con lo que pasa en el camino de ida y el de vuelta? Pues ocurre que al no ser Las Vegas, se puede departir sobre lo sucedido con pelos y señales, y eso es lo que, con la ayuda de la inspiración de la Virgen del Castañar, os narraré a continuación.

Cuando Murphy al enunciar su Ley dijo: "Toda tostada sumergida en un fluido, experimente el empuje que experimente, caerá siempre al suelo por la parte de la mantequilla, básicamente porque las tostadas también son de Dios y en aras a amortiguar la caída, se esmorran por la parte mas blandita y jugosona, a excepción de las de pan de pueblo a las que las da lo mismo baldarse porque están cazás a lazo"; pues bien, aunque cuando Murphy enunció la referida Ley, se acababa de pillar los cojones con la tapa de un piano, no le faltaba razón, y si leéis entre líneas el enunciado os daréis cuenta de que lo que el muchacho estaba insinuando es que si hay posibilidades, aunque mínimas, de que algo se tuerza, tened por seguro que se va a torcer.

Esto de la torcedura de lo torcible, lo experimentamos nosotros el fin de semana pasado cuando a 50 kilómetros de Madrid y con todo el camino por delante, pinchamos una rueda. Tras tan inoportuno percance, descendimos del vehículo para cambiarla, y no llevábamos en la faena ni 5 minutos, cuando llegó una pareja de la Guardia Civil:

- Alex.- Hay que joderse que se nos tenga que pinchar la rueda nada mas salir...
- Kaskete.- Las cosas de la vida, hemos venido a este valle de lágrimas a sufrir y a padecer.
- Alex.- ¡Me cago en mi manto!
- Kaskete.- Buenooooo, pues espérate, que por ahí vienen los civiles...
- Guardia Civil 1.- ¡Alto a la Guardia Civil!
- Kaskete.- ¿Pero que alto? ¡Si estamos paraos en el arcén con una rueda pinchada!
- Guardia Civil 2.- Es que estamos obligaos a dar el alto, porque así lo exige el manual.
- Alex.- ¿Pero qué manual? ¡Porque es que manuales hay muchos!
- Guardia Civil 1.- Coño, pues el Manual de tu puta madre... ¿Cual va a ser si no? A ver, contesten... ¿Que hacen ustedes paraos en medio de la autopista?
- Kaskete.- Pues como le acabo de decir, es que hemos pinchao una rueda y...
- Guardia Civil 2.- Con que una rueda... ¿eh? A ver... ¡Abran el maletero ahora mismo!
- Alex.- Es que vamos a una despedida de soltero que le hemos montao a un amigo y...
- Guardia Civil 1.- Con que una despedida... ¿eh? ¡El maletero abierto ya!
- Guardia Civil 2.- ¿Pero esto que es? Botellas de alcohol a mansalva, probablemente de contrabando... una caja tomates, seguramente robaos... ¿Y esto? ¡Una muñeca hinchable! ¡Se os van a caer los webos!
- Kaskete.- Esto no es lo que parece...

(...)


- Guardia Civil 1.- Con que no es lo que parece... ¿eh? ¡A ver! ¡Los papeles de la caja tomates! ¡Y rápido! ¡Que en la Guardia Civil lo queremos todo a la puta carrera!
- Alex.- Pero agente, si estos tomates venían sin documentación alguna.
- Guardia Civil 2.- Ya os veo yo venir a vosotros, no lleváis papeles porque os lo gastáis todo en papelinas... ¡que sois unos yankis!
- Kaskete.- ¿No se dice yonkis?
- Guardia Civil 1.- ¡Se dice mis cojones! ¿O sea que lo reconocéis? ¡Libertinos! ¡Anarquistas!
- Kaskete.- No no, yo solo estaba corrigiendo el lapsus.
- Guardia Civil 2.- ¿Corrigiendo el qué? ¡Eso no me lo dices en la calle!
- Kaskete.- En la calle estamos.
- Guardia Civil 2.- ¿Te gustaría decírmelo en la comandancia?
- Kaskete.- Hombre, pues preferiría que no, porque he oído que los calabozos están muy oscuros y como soy un niñito chiquitín me dan miedo.
- Guardia Civil 1.- Pues menos mal, porque a nosotros también nos acojonan un poco, fíjese que yo hasta creo que hay lagartijas...
- Alex.- Si es que esos bichos no respetan nada... ¡Un pico y una pala les daba yo! ¡Por hijos de viuda!
- Guardia Civil 2.- Veo que sois gente seria, y formal; y esa rueda destartalada y hecha un higo da sustento de firmeza a vuestra coartada del pinchazo.
- Kaskete.- El problema es que ya no se construyen ruedas de buena calidad, como antiguamente; si Solchaga levantara la cabeza...
- Guardia Civil 1.- Cuanta razón albergan sus sabias palabras amigo mío, yo aun recuerdo con nostalgia aquella hermosa época en la que Reinaban los Paleontólogos, y cuyo emocionantísimo lema de gobierno a modo de leit motiv fue: "Todo para el pueblo, pero sin su puta madre”, que acompañaba al bello eslogan: “Ni una mula sin albarda, ni un cateto sin su boina".
- Alex.- Que tiempos aquellos en los que todos desempeñábamos nuestro cometido con alegría y regocijo, nos tocase el que nos tocase.
- Guardia Civil 2.- Yo en ese sentido siempre lo tuve claro, porque cuando vine al mundo mi madre, que era una santa, le preguntó al médico: “Doctor, que ha sido... ¿niña o niño?”, y el médico la dijo: “Ni una cosa, ni la otra... ¡ha tenido usted un Guardia Civil!”.
- Kaskete.- Una hermosa anécdota, sin duda. Que le iba a decir yo... ¿entonces podemos marcharnos ya? Porque mientras departíamos alegremente hemos arreglado la rueda y ya podemos zarpar.
- Guardia Civil 1.- No se... podríamos hacer la vista gorda con lo de el alcohol de garrafa y lo de la muñeca hinchable... pero es que lo de los tomates es mu gordo.
- Alex.- Pero si son para hacernos una ensalada...
- Guardia Civil 1.- ¡Ah! ¿Que no son para tomate frito?
- Alex.- ¡Ni muchísimo menos!
- Guardia Civil 1.- Entonces pueden ustedes seguir con su camino tranquilamente.
- Kaskete.- Pues muy agradecido agente, póngame a los pies de su señora.
- Guardia Civil 2.- Que tengan buen viaje.
- Alex.- Muchas gracias.
- Guardia Civil 1.- Eso si... ¡Ni se les ocurra limpiarse el culo con una ardilla! ¿Eh?
- Kaskete.- Ahí ya no prometemos nada.

Como son los civiles, en cuanto que te los llevas a su terreno te ganas su pequeño corazoncito de turrón y mazapán. Eso si, lo de los tomates era cierto... ¡hay que ser muy degenerado para hacerlos en salsa de tomate frito!

¿Y el SEPRONA? Bien, gracias, en la torreta. Pero esa ya es otra historia.